Las
organizaciones sanitarias no pueden medirse sólo por el resultado económico cosechado, ya que no es el principal resultado. El principal tiene que ver con la capacidad resolutiva de esa
organización sanitaria, es decir, lo bien que atienden, tratan y curan a los pacientes, y que los
profesionales sanitarios se sientan integrados en la organización. Son organizaciones que son gestionadas con órganos de gobierno fuerte.
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